Vinieron a casa un día de verano. Era una parejita solitaria en busca de albergue, así que no nos opusimos a que se queden en casa. Eligieron un lugar en un rincón y se armaron su casita, ellas mismas masticaron la celulosa. Con el tiempo ampliaron su hogar, para albergar a la inminente descendencia del frío del invierno.
Y no molestan para nada, al contrario de lo que uno podría llegar a pensar.
7 comentarios:
Miel gratis. Aunque si son avispas, es picante... ¡O un nuevo reto!
Yo me muero de miedo. No te exagero Popin, me caigo muerta ahi.
Modo fobico > ON
Tiene razón Hermana, ¡miel! Ñam :)
Te admiro.
Pero por tu tranquilidad se nota que jamás te corrió un enjambre de abejas o avispas.
En verano se van a poner un toque más activas y ahí la cosa cambia.
Hermana: Es chiquito el avispero, las picadas no valen un dedal de miel. Pero los retos no se pueden rechazar, no hay honor en ello (?)
dissors: Estas avispas son tranquilísimas, las que joden son las abejas del vecino, que se meten en todos lados con ese zumbido de porquería.
Frestón: Es más fácil y menos peligroso pedirle al vecino, claro que sin contarle las masacres que hiciste en otras oportunidades con agua jabonosa o con una raqueta de tenis.
Hugo: Las abejas son peores. Estas avispas hacen la suya, ni siquiera se meten en la casa. Y están desde la primavera pasada e igual no molestaron.
Muero
Muero
Muero
Muero
Muero...
de amor (?)
Igual, parecen simpáticas xD.
Uhh yo tenía abejas. Mis enemigas color taxi.
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