Del diario intimo de Amiel
Datos inútiles, teorías prestadas, recuerdos innecesarios, citas de libros conocidos por casi todos, y hasta por ahí, alguna opinión sobre temas que no interesan. Esa podría ser la descripción de este espacio, pero creo que la pregunta "¿Y esto para que me sirve?" es mucho más precisa. Quien dice por ahí algo de todo esto le sirva a alguien.
viernes, 4 de mayo de 2012
Piedra de Rosetta Para Descifrar a Mr. Popo
A 20 de septiembre de 1866:
Mis amigos, los de la vieja guardia, están descontentos de mí. Encuentran que nada hago, que engaño su expectativa y sus esperanzas... Yo también estoy descontento... Lo que interiormente me enorgullecería, es inaccesible para mí, imposible, y me rebajo con insignificancias, con charlatanería y con distracciones. Nunca he tenido gran esperanza; pero oscilo entre la melancolía desolada y el quietismo apacible. Y, sin embargo, leo, hablo, enseño y escribo. Pero no importa; esto lo hago como un sonámbulo. La tendencia búdica embota la facultad de la libre disposición de sí mismo y disuelve la potencia de acción; la desconfianza en sí mismo mata el deseo y por eso caigo siempre en el escepticismo interior. Sólo me gusta lo serio y no puedo tomar a lo serio mis circunstancias ni a mí mismo; denigro a mi persona y hago mofa de ella, lo mismo que de mis aptitudes y de mis aspiraciones. Continuamente estoy compadeciéndome de mí mismo en nombre de lo bello y de lo admirable. En una palabra, llevo en mí un detractor perpetuo de mi persona; lo cual me quita todo impulso.
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